ADOUR Y BARTHES
Saint-Barthélemy es un pueblo de 600 habitantes situado a orillas del río Adour, a pocos kilómetros de la desembocadura. Los Barthes de l’Adour representan un humedal notable y original constituido por zonas boscosas y prados inundables que albergan una multitud de aves (grullas, espátulas, cigüeñas, garzas, gaviotas, gorriones…) así como numerosas especies animales (nutrias, visones, cistudes, lucanes…) y vegetales (angélica, Marsilea…) protegidos.
La contención del río completada por un ingenioso sistema de puertas a flote (importado de Holanda en el siglo XVI) ha permitido regular el nivel de agua en los Barthes e implantar un hábitat muy característico: Grandes granjas generalmente constituidas por un establo en la planta baja (piso flotante), salas de estar en el piso superior y un ático bajo el techo. Si bien los ocupantes deben hacer frente a veces a inundaciones importantes, se benefician de un suelo fértil y de un río de peces (anguilas, lampreas, sábalos…).
Hay que salir de las orillas del Adour para descubrir el pequeño pueblo de San Bartolomé. Se compone de algunas casas de arquitectura basco-landas de las que destacan el ayuntamiento y la antigua escuela. La iglesia gótica encaramada sobre un pitón rocoso ofrece una vista panorámica de los Barthes, el país vasco y los Pirineos. Una tabla de orientación es el punto de partida de un circuito peatonal señalizado de unos 12 km, muy apreciado por los observadores de la naturaleza.
